No sé vosotros, pero yo ya estoy harta del horario de verano. ¡Qué ganas de recuperar mi hora de sueño! Y es que, aunque dicen que el horario de verano se creó para aprovechar mejor la luz solar, yo solo noto que me levanto más cansada y me cuesta más conciliar el sueño.
Soy de las que prefiere disfrutar de las tardes largas en verano, pero que empiece a oscurecer a las seis y media de la tarde en otoño e invierno me parece una locura. En estos meses, me cuesta más salir de casa por la noche porque no me gusta conducir de noche, y eso hace que mi vida social se resienta un poco.
En fin, para gustos los colores. Habrá quien prefiera el horario de verano y quien prefiera el horario de invierno. Yo, personalmente, me quedo con el horario de invierno. ¿Y vosotros?
¡A disfrutar del cambio de hora!