AEMET borrasca Caetano
La esperada borrasca Caetano ha llegado por fin a la Península Ibérica, y lo ha hecho con fuerza, dejando vientos huracanados y abundantes lluvias en su estela. La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha activado avisos en 14 comunidades autónomas, donde se esperan rachas de viento de hasta 120 kilómetros por hora y olas de más de seis metros.
Las zonas más afectadas por la borrasca son el noroeste peninsular, donde se han registrado rachas de viento de hasta 140 kilómetros por hora en zonas de montaña, y el litoral cantábrico, donde las olas han superado los siete metros. También se esperan fuertes lluvias en el norte y centro de la Península, con acumulaciones de hasta 100 litros por metro cuadrado en algunas zonas.
La AEMET recomienda extremar las precauciones y evitar salir de casa si no es necesario. También aconseja asegurar objetos que puedan ser arrastrados por el viento, como macetas o antenas, y cerrar todas las ventanas y puertas.
Las autoridades han activado los protocolos de emergencia en las zonas más afectadas, y se han desplegado equipos de rescate y ayuda humanitaria para atender a las posibles incidencias.
Se espera que la borrasca Caetano continúe azotando la Península Ibérica durante las próximas horas, aunque irá perdiendo fuerza gradualmente. La AEMET mantendrá activados los avisos hasta que la situación mejore.
Impacto en las infraestructuras
La borrasca Caetano está provocando importantes daños en las infraestructuras, especialmente en el tendido eléctrico. Se ha informado de numerosos cortes de luz en varias localidades, y se están produciendo retrasos y cancelaciones en los servicios de transporte, tanto por carretera como por ferrocarril.
Llamamiento a la responsabilidad
Las autoridades hacen un llamamiento a la responsabilidad de la ciudadanía para que se sigan las recomendaciones de la AEMET y se extreme la precaución ante la borrasca Caetano. Es importante recordar que las fuertes rachas de viento y las lluvias torrenciales pueden ser muy peligrosas, y que es mejor prevenir que lamentar.