Si te ofrecen Nescafé a un precio muy por debajo del mercado, es muy probable que sea falso. Las cafeteras comerciales obtienen Nescafé a un precio competitivo, pero nunca por debajo del coste. Si ves una oferta demasiado buena para ser verdad, desconfía.
El envase original de Nescafé es transparente, con una tapa de plástico verde y el logo de la marca visible. Si el envase que tienes es diferente, podría tratarse de una imitación.
El Nescafé original tiene un polvo de café fino y uniforme. Si el polvo que tienes es grueso, grumoso o de color extraño, podría ser falso.
El Nescafé original tiene un sabor y aroma característicos. Si el café que estás tomando no sabe igual, es probable que sea una imitación.
El Nescafé original se fabrica en Nestlé, una empresa de renombre internacional. Si el café que tienes proviene de una fuente desconocida o sospechosa, es muy probable que sea falso.