¡Colocolo, el Cacique de América!




Colocolo, el coloso de Macul, el equipo más grande de Chile. Su historia está llena de gloria, pasión y garra. Cada partido es un grito de aliento, una muestra de amor por la camiseta alba.

Recuerdo mi primer partido en el Monumental. Tenía apenas 10 años y mi padre me llevó a ver al Colo. El estadio estaba a reventar, el ambiente era electrizante. El Cacique goleó 5-0 y yo volví a casa con el corazón lleno de alegría.

Un club de leyenda

Colocolo es un club de leyenda. Su historia se remonta a 1925, cuando un grupo de estudiantes de la Universidad de Chile decidió crear un equipo de fútbol. El nombre fue elegido en honor al legendario guerrero mapuche Colocolo.

A lo largo de su historia, Colocolo ha ganado 33 títulos de liga, más que cualquier otro equipo chileno. También ha ganado 13 Copas Chile y una Recopa Sudamericana. En 2019, llegó a la final de la Copa Libertadores, algo que nunca antes había logrado un equipo chileno.

Jugadores icónicos

Colocolo ha tenido a lo largo de su historia a grandes jugadores. El más grande de todos ellos es Carlos Caszely, "El Chueco". Caszely fue un delantero excepcional que jugó en el Colocolo durante 10 años, marcó más de 200 goles y ganó 6 títulos de liga.

Otros jugadores icónicos del Colocolo son: Elías Figueroa, Leonel Sánchez, Sergio Livingstone y David Henríquez. Estos jugadores han dejado una huella imborrable en la historia del club.

La Garra Albos

La Garra Albos es el espíritu que caracteriza al Colocolo. Es la tenacidad, la lucha y el nunca darse por vencido. No importa si el partido está perdido, el Colocolo siempre sale a ganar.

La Garra Albos es lo que hace especial al Colocolo. Es lo que nos une a todos los colocolinos, sin importar dónde estemos.

¡Vamos Colocolo!
  • ¡El Cacique es Chile!
  • ¡Arriba el Colo!
  • Si eres colocolino, lleva la camiseta con orgullo. Si no lo eres, respeta al equipo más grande de Chile. Porque Colocolo es más que un club, es una pasión, un sentimiento, una forma de vida.

    ¡Vamos Colocolo, por siempre campeón!