El salvavidas que salva vidas: el airbag




¿Quién no conoce el airbag? Es un dispositivo de seguridad indispensable en los coches modernos que ha salvado miles de vidas.
Inventado en los años setenta por el ingeniero alemán Walter Linderer, el airbag consiste en una bolsa de nailon que se infla rápidamente cuando el coche detecta un impacto. El objetivo es proteger al conductor y a los pasajeros de los golpes contra el salpicadero, el volante y las ventanillas.
El funcionamiento del airbag es increíblemente rápido: se infla en tan solo unos milisegundos, creando un colchón de aire que amortigua el golpe. Esto puede reducir significativamente el riesgo de lesiones graves o incluso fatales.
Inicialmente, los airbags solo se instalaban en el asiento del conductor. Sin embargo, con el tiempo se han ido añadiendo a otros asientos, incluyendo los laterales y traseros. Actualmente, la mayoría de los coches nuevos vienen equipados con múltiples airbags para una protección óptima.
Además de los airbags tradicionales, existen otros tipos más específicos, como los airbags laterales de cortina, que se despliegan desde el techo del coche, o los airbags de rodilla, que protegen la zona de las piernas. También hay airbags para peatones, diseñados para reducir el riesgo de lesiones si el coche atropella a una persona.
El airbag es un dispositivo esencial que ha revolucionado la seguridad en los coches. Es un ejemplo de cómo la tecnología puede salvar vidas y hacer nuestras carreteras más seguras para todos.