Crecí en una familia humilde de Buenos Aires. Desde chico, mi pasión era el fútbol. Pasaba horas jugando en la calle con mis amigos, soñando con ser un jugador profesional. A los 12 años, me fichó San Lorenzo, y desde ese momento supe que estaba en el lugar correcto para cumplir mis sueños.
Mis primeros años en el club fueron duros. Tuve que adaptarme a un nuevo ritmo de vida, a nuevos entrenadores y a nuevos compañeros. Pero siempre tuve el apoyo de mi familia y de los técnicos que confiaron en mí. A base de esfuerzo y dedicación, fui ascendiendo categorías hasta llegar a la Primera División.
Mi debut en Primera fue un momento inolvidable. Sentí mucha emoción y responsabilidad al representar a mi club. Desde ese día, me propuse dar el máximo en cada partido para ayudar a San Lorenzo a lograr sus objetivos.
Este año, estamos teniendo una gran temporada. Estamos peleando por el campeonato y seguimos vivos en la Copa Libertadores. Me enorgullece formar parte de este equipo y contribuir a sus éxitos.
Mi sueño es jugar en Europa. Creo que tengo las condiciones para triunfar en una de las mejores ligas del mundo. Estoy trabajando duro para mejorar día a día y prepararme para el desafío de jugar en el Viejo Continente.
Sé que el camino no será fácil, pero estoy dispuesto a darlo todo para alcanzar mi sueño. Soy consciente de las dificultades que me encontraré, pero también confío en mis capacidades y en el apoyo de mi familia y mis compañeros.
El fútbol es mi pasión, mi vida. Estoy decidido a aprovechar al máximo cada oportunidad que se me presente. Quiero dejar una huella en este deporte y ser recordado como uno de los mejores defensores argentinos de la historia.
Gracias por la entrevista, Federico. Te deseamos lo mejor en tu carrera.
Federico Gattoni:
Gracias a ustedes por la oportunidad de compartir mi historia. Espero que mi ejemplo sirva de inspiración para otros jóvenes que sueñan con triunfar en el fútbol.