Flores amarillas, marzo
¿Quién dijo que marzo era un mes gris? Para mí, es el mes de las flores amarillas.
El amarillo es un color que siempre me ha levantado el ánimo. Es el color del sol, de la alegría y de la esperanza. Y en marzo, cuando los días empiezan a ser más largos y el sol más fuerte, las flores amarillas salen a saludarnos.
Son flores sencillas, pero hermosas. Florecen en los campos, en los parques, en los jardines. Son un regalo de la naturaleza que nos alegra la vista y nos recuerda que, incluso en los momentos más difíciles, siempre hay algo bueno que nos espera.
Una de mis flores amarillas favoritas es el narciso. Es una flor que siempre me trae buenos recuerdos. Cuando era niño, mi abuela tenía un jardín lleno de narcisos. Me encantaba ir a visitarla en primavera y ver las flores amarillas bailando con la brisa.
Otra flor amarilla que me gusta mucho es el tulipán. Es una flor elegante y sofisticada. En Holanda, hay campos enteros de tulipanes de todos los colores. Es un espectáculo impresionante que merece la pena ver al menos una vez en la vida.
Pero no sólo hay flores amarillas en la naturaleza. También podemos encontrarlas en otras cosas, como por ejemplo en la comida. El plátano es una fruta amarilla que es muy rica en potasio. Es una fruta perfecta para desayunar o para merendar.
También podemos encontrar flores amarillas en la ropa y en los complementos. Una camisa amarilla puede alegrar cualquier look. Y un collar con flores amarillas puede darle un toque de elegancia a cualquier atuendo.
El amarillo es un color que me inspira alegría, esperanza y optimismo. Es el color de la felicidad. Y en marzo, cuando las flores amarillas florecen, me siento especialmente feliz.
Así que, si te sientes un poco triste o desanimado, te recomiendo que salgas a dar un paseo por la naturaleza y que busques flores amarillas. Te aseguro que te harán sentir mejor.