Horacio de la Peña, el Pulga que revolucionó el tenis argentino




Horacio de la Peña, más conocido como "el Pulga", es un ex tenista argentino que marcó una época en el tenis de su país. Nació el 1 de agosto de 1966 en Buenos Aires y desde muy pequeño mostró su pasión por el deporte.
A pesar de su baja estatura, de apenas 1,70 metros, de la Peña compensó su falta de altura con una velocidad y agilidad excepcionales. Su estilo de juego se caracterizaba por un revés a dos manos potente y un juego de pies rápido como el rayo.
In 1984, de la Peña se convirtió en profesional y rápidamente ascendió en el ranking de la ATP. Ganó su primer título ATP en 1988 en el Torneo de Roma, derrotando en la final al mismísimo Boris Becker. Este triunfo lo catapultó al top 20 del mundo y lo consolidó como uno de los mejores tenistas argentinos de la época.
A lo largo de su carrera, de la Peña ganó un total de cuatro títulos ATP en individuales y alcanzó la final de otros siete torneos. Además, representó a Argentina en la Copa Davis en numerosas ocasiones, contribuyendo a que su país llegara a la final en 1985.
Más allá de sus logros deportivos, de la Peña también es conocido por su personalidad carismática y su gran sentido del humor. Su apodo, "el Pulga", se debe a su pequeño tamaño, pero también refleja su estilo de juego rápido y eléctrico.
Tras retirarse del tenis profesional, de la Peña se dedicó a la formación de nuevos talentos. Fue entrenador de varios jugadores argentinos, entre ellos el ex número 5 del mundo, Fernando González.
Actualmente, de la Peña sigue muy vinculado al tenis, tanto como comentarista de televisión como a través de su escuela de tenis, donde transmite su pasión por el deporte a las nuevas generaciones.
Horacio de la Peña, el Pulga, será siempre recordado como uno de los tenistas más emblemáticos de Argentina, un jugador que revolucionó el deporte con su talento, velocidad y espíritu inquebrantable.