En el corazón del entrañable barrio de Saavedra, donde las calles arboladas se entrelazan con un pasado futbolístico glorioso, reside el Club Atlético Independiente Platense, un bastión del deporte y una parte indeleble de la identidad saavedrense.
Fundado en 1917 por un grupo de jóvenes apasionados por el fútbol, Independiente Platense ha recorrido un camino lleno de hazañas, alegrías y momentos inolvidables. Desde sus humildes orígenes en las canchas de tierra hasta su actual estadio en la Avenida del Libertador, el club ha sido testigo de innumerables victorias y también de algunas derrotas que han forjado su carácter resiliente.
El "Rojo" de Saavedra, como se le conoce popularmente, es mucho más que un club de fútbol. Es un punto de encuentro para la comunidad, un lugar donde los vecinos se reúnen para alentar a su equipo, compartir anécdotas y construir lazos de amistad. El espíritu de familia que reina en Independiente Platense es su mayor tesoro y lo que lo distingue de otros clubes.
A lo largo de su historia, Platense ha escrito páginas doradas en el fútbol argentino. Ha disputado más de 50 temporadas en la Primera División, donde ha enfrentado a los grandes de nuestro país con un coraje y una garra admirables. Jugadores emblemáticos como Antonio "Maestrito" Ganduglia, Juan Carlos "Toto" Lorenzo y Omar "El Lobo" Larrosa han vestido la camiseta roja y blanca, dejando una huella imborrable en el corazón de los hinchas.
Sin embargo, más allá de los logros deportivos, lo que verdaderamente hace especial a Independiente Platense es su espíritu social. El club cuenta con un amplio programa de actividades extradeportivas, como escuelas de fútbol para niños y niñas, un comedor comunitario y un centro de día para personas mayores. Estas iniciativas demuestran el compromiso del "Rojo" con el barrio y su voluntad de generar un impacto positivo en la sociedad.
Para los hinchas de Platense, el club es más que un simple equipo de fútbol. Es una forma de vida, una pasión que se transmite de generación en generación. Es el lugar donde se comparten alegrías, se consuelan las penas y se forjan amistades duraderas. Es el orgullo de Saavedra, un club que representa los valores de la amistad, el respeto y el amor por el deporte.
En la actualidad, Independiente Platense enfrenta nuevos desafíos y sueños por cumplir. El club se encuentra en plena reconstrucción, con un proyecto ambicioso que apunta a devolverlo a los primeros planos del fútbol argentino. Los hinchas acompañan con fervor este camino, confiados en que el "Rojo" volverá a brillar con la fuerza y la pasión que lo han caracterizado a lo largo de su historia.
Porque Independiente Platense no es solo un club de fútbol. Es un sentimiento, un pedacito del corazón de Saavedra que late con más fuerza cada vez que la pelota rueda sobre el césped del estadio. Es un orgullo que llevamos en el pecho y que compartimos con todos los que sienten los colores rojo y blanco.
¡Vamos Platense, vamos Rojo!