Como hincha acérrimo de Melgar y arequipeño de corazón, no puedo evitar sentir un orgullo inmenso al escribir estas líneas. Melgar, nuestro querido "León del Sur", ha logrado algo extraordinario al alcanzar la final de la Copa Sudamericana, un hito histórico para el fútbol peruano.
Aún recuerdo aquel 1987, cuando Melgar hizo vibrar a toda la ciudad con su primera participación en la Copa Libertadores. Desde entonces, el equipo ha pasado por altibajos, pero siempre ha mantenido el espíritu de lucha y el apoyo incondicional de su fiel hinchada.
En los últimos años, Melgar ha ido escalando posiciones con un fútbol ofensivo y atrevido. Jugadores como Bernardo Cuesta, Luis Iberico y Kevin Quevedo han demostrado su calidad dentro y fuera del campo, convirtiéndose en ídolos para todos los arequipeños.
Más allá del resultado, lo más importante es que Melgar ha llenado de alegría a toda Arequipa y al Perú. El equipo representa los valores de lucha, humildad y perseverancia, valores que debemos abrazar todos como peruanos.
Como arequipeño, me siento orgulloso de ser hincha de Melgar. El equipo ha unido a la ciudad y nos ha demostrado que con esfuerzo y pasión todo es posible. ¡Vamos, Melgar, por la gloria!
¡Viva Melgar, viva Arequipa, viva el Perú!