Los síntomas del neuroma de Morton incluyen un dolor agudo o ardiente en la bola del pie, generalmente entre el tercer y cuarto dedo del pie. El dolor puede empeorar al caminar o estar de pie durante períodos prolongados. También puede haber entumecimiento, hormigueo o debilidad en los dedos afectados.
El neuroma de Morton se diagnostica mediante un examen físico y una historia clínica. Es posible que se necesiten radiografías para descartar otras afecciones, como una fractura por estrés.
El tratamiento del neuroma de Morton tiene como objetivo aliviar el dolor y la presión sobre el nervio. Las opciones de tratamiento incluyen:
La mayoría de las personas con neuroma de Morton pueden controlar sus síntomas con tratamiento conservador. Sin embargo, en algunos casos, es necesaria la cirugía para extirpar el neuroma.
Si experimentas dolor o molestias en la bola del pie, es importante consultar a un médico para que te diagnostiquen y traten adecuadamente.
Siguiendo estos consejos, puedes reducir el riesgo de desarrollar neuroma de Morton.