PERICO DELGADO




¿Quién no ha oído hablar de Perico Delgado? El ciclista español que en el año 1988 ganó el Tour de Francia tras una agónica subida en la cima de Alpe d'Huez. El segoviano escribió su nombre en letras de oro en la historia del ciclismo mundial, convirtiéndose en un auténtico héroe para los aficionados españoles.

Pero detrás de la leyenda hay un hombre, un deportista que sufrió y se sobrepuso a las adversidades, un ser humano con sus fortalezas y debilidades. Y es ese Perico Delgado el que nos interesa conocer en este artículo.

Los inicios

Pedro Delgado Robledo, más conocido como Perico Delgado, nació en Segovia el 16 de mayo de 1960. Desde muy pequeño mostró su pasión por el ciclismo, y a los 14 años ya competía en carreras locales. Su talento no pasó desapercibido para los ojeadores, y en 1982 dio el salto al profesionalismo con el equipo Reynolds.

El Tour de Francia

La gran hazaña de Perico Delgado llegó en el Tour de Francia de 1988. El segoviano afrontaba la carrera con la vitola de favorito, pero las cosas no empezaron bien para él. Sufrió una caída en la primera etapa y perdió mucho tiempo. Sin embargo, Perico no se rindió y poco a poco fue recuperando terreno.

La etapa clave fue la 17ª, con final en Alpe d'Huez. Delgado atacó a falta de pocos kilómetros para la meta y llegó en solitario a la cima. Fue una victoria épica que le permitió vestirse de amarillo y afrontar la contrarreloj final con ventaja sobre sus rivales.

El 24 de julio de 1988, Perico Delgado cruzó la meta de los Campos Elíseos como vencedor del Tour de Francia. Su victoria fue una inyección de moral para todo el deporte español y le convirtió en un ídolo de masas.

El hombre detrás del ciclista

Más allá de sus éxitos deportivos, Perico Delgado es un hombre sencillo y cercano. Es un gran amante de su tierra, Segovia, y siempre ha estado comprometido con los valores del deporte y la solidaridad.

Tras su retirada del ciclismo, Perico Delgado ha continuado ligado al mundo del deporte. Ha sido comentarista de ciclismo en televisión, director deportivo de equipos ciclistas y presidente de la Federación Española de Ciclismo.

En la actualidad, Perico Delgado es un hombre feliz y realizado. Disfruta de su familia, de sus amigos y de su pasión por el ciclismo. Es un referente para todos aquellos que creen en el esfuerzo, la constancia y la superación.

Reflexión

La historia de Perico Delgado es una historia de éxito, pero también de sacrificio y perseverancia. Es un ejemplo de que con esfuerzo y dedicación se pueden alcanzar los sueños.

Que su victoria en el Tour de Francia de 1988 sirva de inspiración para todos aquellos que luchan por sus sueños, por muy difíciles que parezcan.