¿Qué es un linfoma cerebral?




Un linfoma cerebral es un cáncer del cerebro que se origina en las células del sistema inmunitario llamadas linfocitos.
Los linfocitos normalmente ayudan a proteger el cuerpo de las infecciones, pero en el caso de un linfoma cerebral, estas células se vuelven cancerosas y comienzan a multiplicarse de forma descontrolada.
Esta afección es poco frecuente y representa aproximadamente el 4% de todos los tumores cerebrales.
Síntomas de un linfoma cerebral
Los síntomas de un linfoma cerebral pueden variar dependiendo de la ubicación y el tamaño del tumor. Algunos de los síntomas más comunes incluyen:
  • Dolores de cabeza
  • Náuseas y vómitos
  • Convulsiones
  • Dificultades en el habla o el lenguaje
  • Cambios en el estado de ánimo o comportamiento
  • Problemas de equilibrio o coordinación
  • Pérdida de visión o audición
Causas de un linfoma cerebral
La causa exacta de los linfomas cerebrales es desconocida, pero se cree que están relacionados con el sistema inmunitario. Algunos factores que pueden aumentar el riesgo de desarrollar un linfoma cerebral incluyen:
  • Tener un sistema inmunitario debilitado, como en el caso del VIH/SIDA
  • Haber recibido un trasplante de órganos o médula ósea
  • Estar expuesto a radiación
Diagnóstico de un linfoma cerebral
El diagnóstico de un linfoma cerebral generalmente se realiza mediante una combinación de pruebas, como:
  • Examen físico y neurológico
  • Resonancia magnética (RM) o tomografía computarizada (TC) del cerebro
  • Biopsia del tumor
Tratamiento de un linfoma cerebral
El tratamiento del linfoma cerebral generalmente implica una combinación de:
  • Quimioterapia
  • Radioterapia
  • Terapia dirigida
El plan de tratamiento específico dependerá de la ubicación y el tamaño del tumor, así como del estado general de salud del paciente.
Pronóstico de un linfoma cerebral
El pronóstico de un linfoma cerebral varía según varios factores, como el tipo y la ubicación del tumor, el estadio de la enfermedad y la respuesta al tratamiento. En general, el pronóstico es mejor para los pacientes diagnosticados en etapas tempranas y que responden bien al tratamiento.