En el corazón de la Ciudad de México, en un lugar conocido como el anexo León, un grupo de reclusos planeó y ejecutó una fuga audaz que conmocionó a la nación. Los prófugos, acusados de delitos graves, se convirtieron en fugitivos más buscados, desatando una persecución masiva.
Todo comenzó en la madrugada del 18 de enero de 2023, cuando ocho reclusos, entre ellos un presunto líder de un cartel de la droga, escaparon del anexo León. Utilizando herramientas ocultas y un plan meticulosamente elaborado, lograron burlar la seguridad y desaparecer en la noche.
La fuga desató un frenesí mediático y una intensa investigación policial. Los funcionarios afirmaron que los fugitivos estaban fuertemente armados y representaban un peligro para el público. Las autoridades emitieron alertas a nivel nacional, ofreciendo recompensas por información que condujera a su captura.
La persecución de los prófugos se extendió por todo el país, con unidades policiales allanando posibles escondites y persiguiendo pistas. Los ciudadanos se mantuvieron en alerta máxima, con el temor de estar cerca de los fugitivos acechando en las sombras.
"Fue como algo salido de una película de acción", recuerda un testigo que presenció la búsqueda policial. "Los helicópteros sobrevolaban, las sirenas aullaban y las fuerzas especiales patrullaban las calles. Era aterrador y emocionante al mismo tiempo".
A medida que la persecución se intensificaba, surgieron rumores y especulaciones. Algunos afirmaron que los fugitivos habían huido del país, mientras que otros creían que todavía se escondían en las vastas metrópolis de México.
Luego, el 12 de febrero de 2023, se produjo un gran avance. Las autoridades arrestaron a "La Viuda Negra" en un hotel de la Ciudad de México. El arresto proporcionó información crucial que llevó a la captura de otros dos fugitivos unos días después.
Sin embargo, la caza de "El Tigre" y "El Profe" continuó. Los fugitivos seguían siendo fantasmas, evadiendo la captura con cada movimiento.
"Esta es una historia de escape, aventura y traición", reflexionó un periodista que cubrió el caso desde el principio. "Es un recordatorio de que incluso aquellos que están detrás de los barrotes pueden encontrar la libertad y el peligro en lugares inesperados".
La fuga del anexo León se convirtió en una leyenda en la Ciudad de México, una historia que se transmitió durante años. Y mientras los prófugos seguían siendo libres, su legado permaneció como un testimonio del ingenio humano, la audacia y el poder de la libertad.