El pasado sábado se disputó uno de los partidos más esperados de la temporada en el Bernabéu. Real Madrid y Osasuna se veían las caras en un duelo que prometía espectáculo y que no defraudó a los aficionados.
El partido comenzó con un ritmo frenético, con ambos equipos buscando el gol con ahínco. Las ocasiones se sucedían en ambas porterías, pero fue el Real Madrid el que se adelantó en el marcador gracias a un tanto de Vinicius Júnior en el minuto 34.
El gol dio alas al conjunto blanco, que se hizo con el control del juego y comenzó a generar más y más peligro. Sin embargo, Osasuna no se rindió y siguió buscando el empate con insistencia. En el minuto 42, una buena jugada colectiva de los navarros terminó con el balón en las botas de Chimy Ávila, que no perdonó y puso el 1-1.
La segunda parte fue aún más emocionante que la primera. Ambos equipos salieron decididos a llevarse la victoria y el ritmo del partido fue trepidante. Las ocasiones se sucedían en ambas porterías y el público no paraba de animar a sus equipos.
En el minuto 60, el Real Madrid volvió a adelantarse en el marcador gracias a un gol de Karim Benzema. El delantero francés aprovechó un pase de Vinicius Júnior para batir al portero de Osasuna con un disparo cruzado.
Osasuna no se rindió y siguió buscando el empate, pero el Real Madrid supo defender su ventaja con uñas y dientes. En el minuto 85, el conjunto blanco sentenció el partido con un gol de Rodrygo Goes, que dejó el marcador en 3-1.
La victoria permite al Real Madrid seguir liderando la clasificación de LaLiga, mientras que Osasuna se mantiene en la zona media de la tabla.
El partido fue un fiel reflejo de la igualdad que existe en la Primera División española. Ambos equipos demostraron un gran nivel y dejaron claro que pueden competir por los puestos altos de la clasificación.