San Alberto




San Alberto es un pequeño municipio, ubicado en el sur del departamento del Cesar, en Colombia. Fue fundado en 1857 y su nombre se lo debe a Alberto Carvajal, un hacendado que donó los terrenos para su construcción.

Es un pueblo tranquilo, con gente amable y trabajadora, que se dedica principalmente a la agricultura y la ganadería. Tiene un clima cálido y seco, con una temperatura promedio de 28°C.

Un paseo por San Alberto

Un recorrido por San Alberto comienza en su plaza principal, que está rodeada de edificios coloniales y tiendas de artesanías. En el centro de la plaza se encuentra una estatua de San Alberto Magno, patrón del pueblo.

Desde la plaza se puede visitar la iglesia de San Alberto, que es una construcción del siglo XIX, de estilo neoclásico. En su interior se pueden admirar hermosos frescos y tallas en madera.

Además de la iglesia, San Alberto cuenta con otros atractivos turísticos, como el Museo Arqueológico, que alberga una colección de piezas precolombinas encontradas en la región, y el Parque Natural de los Cerros de Mavecure, que es un conjunto de formaciones rocosas que ofrecen unas vistas impresionantes.

La gastronomía de San Alberto

La gastronomía de San Alberto es sencilla y sabrosa, basada en los productos de la tierra. Entre los platos típicos se encuentran el sancocho, el arroz con pollo, la carne asada y el queso costeño.

También son famosas las frutas tropicales, como el mango, la papaya, el banano y la piña.

Cómo llegar a San Alberto

Para llegar a San Alberto se puede tomar un autobús desde la ciudad de Valledupar, que se encuentra a unos 100 kilómetros de distancia.

También se puede llegar en coche, tomando la carretera Troncal del Caribe y luego la carretera que conduce a San Alberto.

Dónde alojarse en San Alberto

En San Alberto hay varios hoteles y hostales donde alojarse. Entre los más recomendados se encuentran el Hotel Plaza, el Hotel Colonial y el Hostal El Viajero.

Conclusión

San Alberto es un pueblo pequeño y encantador, que ofrece a sus visitantes una experiencia tranquila y relajante. Es un lugar ideal para descansar, disfrutar de la naturaleza y conocer la cultura y la gastronomía de la región.