Soy DEA.

¿Alguna vez has sentido que te están observando? ¿Como si cada uno de tus movimientos fuera monitoreado? En mi caso, esa sensación es constante. Porque soy DEA, la temida agencia antidrogas.
Sí, eso mismo, la DEA. La misma que aparece en todas las películas de narcotráfico, allanando cárteles y persiguiendo a los malos. Pero más allá de las apariencias cinematográficas, ¿qué es realmente la DEA y qué hacemos?
Bueno, para empezar, no somos el lobo feroz de los cuentos. No andamos por ahí persiguiendo a gente inocente. Nuestra misión es combatir el tráfico de drogas y garantizar la seguridad de nuestra nación.
Y sí, sabemos que las drogas son un problema complejo. No vamos a resolverlo de la noche a la mañana. Pero creemos que cada incautación, cada arresto, es un paso hacia un mundo más seguro.
Ahora, no voy a mentirles: nuestro trabajo puede ser peligroso. Nos enfrentamos a narcotraficantes violentos y organizaciones criminales internacionales. Pero también es gratificante. Saber que estás haciendo una diferencia, que estás ayudando a salvar vidas, eso no tiene precio.
¿Creen que es fácil? Para nada. Requiere sacrificio, valentía y determinación. Pero cada vez que vemos un joven alejarse de las garras de las drogas, o cuando arrestamos a un capo de la droga, sabemos que vale la pena.
Así que, la próxima vez que escuchen hablar de la DEA, no piensen en los agentes despiadados de las películas. Piensen en nosotros como las personas que están trabajando incansablemente para mantenerlos a salvo de las drogas.
Porque somos la DEA, y no descansaremos hasta que el tráfico de drogas sea cosa del pasado.

Además, tenemos algunos datos curiosos que compartir:
- La DEA fue creada en 1973 por el presidente Richard Nixon.
- El presupuesto anual de la DEA es de aproximadamente 2 mil millones de dólares.
- La DEA emplea a más de 10.000 personas en todo el mundo.
- La DEA tiene oficinas en más de 60 países.
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- La DEA es responsable de la incautación de millones de libras de drogas cada año.