Temblor en Lima: El susto de nuestras vidas




Amigas y amigos, aquí les comparto mi experiencia durante el temblor que sacudió Lima anoche. ¡Fue un susto de aquellos!

Yo estaba tranquilamente viendo mi serie favorita cuando, de repente, ¡bum! Un rugido ensordecedor y todo comenzó a temblar. Los muebles bailaron, los cuadros se cayeron y yo me agarré fuerte a mi sillón pensando: "Se acabó, se acabó el mundo".

Duró como una eternidad, aunque dicen que solo fueron unos segundos. Sentí como si una montaña rusa me sacudiera de un lado a otro, sin control. ¡Qué miedo, de verdad!

  • Mi vecino, el señor Rodríguez, salió corriendo de su departamento gritando "¡Terremoto, terremoto!" como si fuera el mismísimo Nostradamus.
  • Mi gata, Luna, se volvió loca y saltó de un lado a otro como si estuviera poseída por un espíritu travieso.
  • Yo, bueno, yo creo que me salió el alma del cuerpo. ¡Qué susto, qué susto!

Cuando por fin paró, salió el sol y nos dimos cuenta de que todo había pasado. Menos mal que solo fue un susto y que no hubo mayores daños. Pero amigas y amigos, les digo que no voy a olvidar esta noche tan fácilmente.

Sé que los temblores son comunes en Lima, pero nunca había vivido uno tan fuerte. Ahora entiendo por qué la gente aquí está tan preparada para estos sustos. ¡Yo ya tengo mi mochila de emergencia lista, por si acaso!

Bueno, amigas y amigos, espero que esta anécdota les saque una sonrisa y les recuerde que siempre es bueno estar preparados. ¡Hasta la próxima y cuídense!