Torta fritas: un manjar casero con historia y tradición

En cada rincón de nuestro país, la gastronomía es un reflejo de nuestra cultura y tradiciones. Entre tantos sabores y aromas, las tortas fritas se destacan como un manjar hogareño que enamora a todos.

El origen de las tortas fritas se remonta a los tiempos coloniales. Cuentan los historiadores que fueron los españoles quienes trajeron consigo la receta de los buñuelos, una masa frita que los árabes habían popularizado en la Península Ibérica.

Con el paso de los años, los buñuelos fueron adaptándose a los ingredientes y costumbres de nuestra tierra. Así nacieron las tortas fritas, un manjar sencillo que se arraigó profundamente en la cocina criolla.

Ingredientes simples, sabor inigualable

• Harina
• Agua
• Sal
• Grasa (manteca o aceite)

Para lograr unas tortas fritas perfectas, el secreto está en la masa. Una buena proporción de harina y agua es esencial, así como un amasado constante y paciente hasta obtener una masa elástica y suave.

El punto justo de sal es lo que le da ese toque único e irresistible. Y por supuesto, la grasa utilizada para freír es la que aporta ese aroma y textura tan característicos.

En cada hogar argentino, las tortas fritas tienen un significado especial. Son un símbolo de unión familiar, de esos domingos a la tarde compartiendo anécdotas y risas.

Las abuelas y madres son las guardianas de la receta secreta, transmitida de generación en generación. Cada una tiene su toque personal, su secreto para lograr las tortas fritas más deliciosas.

Las tortas fritas son un manjar que nos acompaña en todas las ocasiones. Ya sea en un desayuno campestre, como merienda o para acompañar un mate, siempre son bienvenidas.

También tienen un lugar especial en las celebraciones tradicionales, como el Día de la Patria o el Carnaval. Su aroma y sabor nos transportan a esos momentos de alegría y unión.

Para que todos puedan disfrutar de este delicioso manjar, aquí compartimos una receta sencilla de tortas fritas:

1. En un bol, mezclar 500 gr. de harina con 1 cucharadita de sal.
2. Agregar 250 ml. de agua tibia de a poco, mientras se amasa hasta obtener una masa lisa y elástica.
3. Dejar reposar la masa tapada durante 30 minutos.
4. Estirar la masa finamente y cortar círculos con un cortapastas o un vaso.
5. Freír las tortas en abundante grasa caliente hasta que estén doradas de ambos lados.

Inviten a sus seres queridos, preparen un mate bien caliente y deleiténs
en con un plato de tortas fritas recién hechas. Dejen que su aroma y sabor los transporten a esos momentos únicos y especiales que hacen de la vida un verdadero festín.