En un partido de infarto, el Tottenham Hotspur dio la vuelta a un 2-0 adverso en contra del Manchester City y se llevó la victoria por 3-2 en un vibrante encuentro de la Premier League.
El City salió como un vendaval y se adelantó en el marcador a los 20 minutos con un gol del belga Kevin De Bruyne. Tan solo unos minutos después, el noruego Erling Haaland amplió la ventaja citizen con un remate de cabeza.
Pero el Tottenham no se rindió y poco antes del descanso recortó distancias con un golazo del coreano Son Heung-min. El conjunto londinense salió con todo en la segunda parte y en el minuto 57 empató el partido gracias a un tanto de Pierre-Emile Højbjerg.
Cuando el partido parecía encaminado al empate, apareció Harry Kane para darle el triunfo al Tottenham con un cabezazo en el minuto 85. El delantero inglés, que llevaba cuatro partidos sin marcar, se vistió de héroe para dar una importante victoria a su equipo.
La victoria ante el City es un síntoma claro del buen momento que atraviesa el Tottenham. El equipo de Antonio Conte ha ganado sus últimos cuatro partidos de Premier League y se ha situado en la tercera posición de la tabla.
El técnico italiano ha conseguido inculcar a sus jugadores una garra y una mentalidad ganadora que se refleja en el campo. El Tottenham es un equipo que nunca se rinde y que siempre pelea hasta el final, como demostró en su victoria ante el City.
Pese a la derrota, el City sigue siendo uno de los mejores equipos del mundo. El conjunto de Pep Guardiola es el vigente campeón de la Premier League y cuenta con una plantilla plagada de estrellas.
El partido ante el Tottenham fue una muestra de la calidad del City, que dominó el juego durante gran parte del encuentro. Sin embargo, el Tottenham supo aprovechar sus oportunidades y se llevó una victoria que le permite seguir soñando con conquistar la Premier League.
El Tottenham-City fue un partido que quedará para el recuerdo. El encuentro tuvo todos los ingredientes de un clásico: emoción, goles, intensidad y una gran remontada.
Los aficionados del Tottenham vibraron con la victoria de su equipo, mientras que los del City se lamentaron de no haber podido llevarse los tres puntos. Sin duda, fue un partido que ninguno de los presentes olvidará.
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