El fútbol chileno está de luto tras la trágica muerte de un jugador del Cobresal, ocurrida durante un partido contra el Unión La Calera. El futbolista, de 25 años, recibió un impacto de bengala en la cabeza y falleció poco después en el hospital.
El incidente ha conmocionado al mundo del fútbol y ha puesto de relieve los peligros de la violencia en los estadios. La bengala fue lanzada por un aficionado del Unión La Calera, que ahora está bajo custodia policial.
Este trágico suceso ha empañado la alegría de lo que iba a ser una fiesta del fútbol. El Unión La Calera había ganado el partido por 3-0 y se había asegurado la permanencia en la primera división. Sin embargo, la victoria quedó ensombrecida por la muerte del jugador del Cobresal.
La violencia en los estadios es un problema grave que debe abordarse. No hay lugar para la violencia en el deporte, y las personas que cometen estos actos deben rendir cuentas. Nuestros estadios deben ser lugares seguros para que los aficionados disfruten del fútbol, no zonas de guerra.
Nuestros pensamientos están con la familia y los amigos del jugador fallecido. Que su muerte sirva para recordarnos los peligros de la violencia en los estadios y la necesidad de trabajar juntos para erradicarla.
Que en paz descanse.